EL PADRÓN DE MILITANTES DE UN PARTIDO NO DA TRIUNFOS ELECTORALES

TRAS LA VERDAD

Mañana el INE validará los padrones de afiliados de los partidos políticos, que tienen registrados en cada uno de los estados de la República Mexicana; padrones que fueron ficticiamente inflados por algunos partidos, como fuera en el caso del Estado de Puebla, acusando a Moreno Valle de ello.

 En el caso particular del Estado de Querétaro, en el padrón general que obra en poder del INE, son 207 mil, 697 afiliados entre los nueve partidos políticos con registro ante el Instituto, de un padrón electoral queretano de un millón, 518 mil, 745 electores; lo cual significa que el 14% de ellos están afiliados a cualquiera de esos partidos y el 86% no militan en ningún partido político. Las cifras de militantes resultan reveladoras y muy interesantes los datos que arrojan verdades a medias.

 Por ejemplo, el PRI, es quien más afiliados registra en el padrón de militantes, con 93 mil, 752 inscritos. Sin embargo, en la pasada elección constitucional del 2015 perdió la mayor parte de los cargos de elección popular. Y el PAN, con apenas un padrón 11 mil, 244 militantes, se quedó con la mayoría de esos puestos de elección popular. La realidad parece contradecir los hechos ¿Cómo es posible que con una diferencia tan tremenda de afiliados entre un partido y otro, arrase en las elecciones el de menor militancia? Muy sencillo, el poder de decisión está en los indecisos, en los que no militan en ningún partido; estos son aquellos que castigan o premian según el comportamiento de los gobernantes y el carisma o simpatía de los candidatos que ofertan en las campañas electorales. Y por supuesto que la unidad o división entre la militancia es un factor que incide en ello y el PRI salió a contienda sumamente dividido, fracturado.

 El PRD, con un padrón de 44 mil, 402 afiliados no logró ningún triunfo en las pasadas elecciones; se ha tenido que conformar con un solo diputado de representación proporcional; y en la composición de los ayuntamientos con uno que otro regidor. Sigue Movimiento Ciudadano con un padrón 26 mil, 614 militantes y tampoco logró nada en la pasada contienda, salvo la alianza electoral, sin convenio, que hizo con el PAN, que le permitió conseguir algunos cargos administrativos, pero no de elección popular.

 El partido de los profesores, Nueva Alianza, con un padrón de 15 mil, 129 afiliados, obtuvo por medio de la alianza electoral con el PRI -se quedó hipotéticamente con una diputación local- logró una diputación plurinominal, dado que la actual legisladora no es de ese partido político, aunque lo representa en la LVIII Legislatura, está afiliada al PRI. Estamos en presencia de esos “fraudes electorales” que no se castigan y la omisión de la ley lo permite ¿Verdad que no se refleja en nada la militancia con los triunfos o derrotas electorales?

 Le sigue en la lista de afiliados el Verde Ecologista, partido que también gracias a la alianza electoral con el PRI, consiguió una diputación local, con apenas 7 mil, 381 afiliados; la diputada llega por esa alianza electoral, pero ha respondido más a los intereses de la bancada del PAN, que a la votación que la llevó a la curul. Tampoco está penada esa postura política. Es más, la omisión de la ley electorado les permite, incluso, renunciar al partido político que los llevó al triunfo y adherirse a otro distinto en pleno ejercicio de sus funciones, acto “desleal y fraudulento” a los ciudadanos que votaron por ellos. La norma debe, si no impedirlo, sí respetar la voluntad ciudadana y que el o la desleal, deje el cargo para que entre el funciones el suplente y si este hace lo mismo, que el partido que obtuvo el triunfo proponga otro prospecto de la lista de plurinominales a fin de que se respete el voto de la ciudadanía que los llevó a ese cargo de elección popular.

 El penúltimo en la lista de afiliados es el partido de Morena, con 6 mil, 074 inscritos. Este partido sí obtuvo una diputación plurinominal, a pesar del número tan bajo de militantes. Una vez más la ciudadanía sin partido decide quién pierde o quien gana, no así el de mayor afiliación o militantes; falacia que queda demostrada con absoluta claridad con los fríos números. El ridículo de partido denominado por sus siglas PT, aquel que perdió el registro y gracias a las trampas electorales con el apoyo del PRI, en una elección extraordinaria volvió a recuperarlo por una milésima, lo que le permitió volver a la vida política y gozar de la repartición de millones de pesos por vía de la entrega de las prerrogativas ¡Ah sistema corrupto de partidos!

 En la lista del partido que comanda Gerardo Ríos,  el ex futbolista que anda de fiesta en fiesta, denominado Encuentro Social, no parece registro alguno. Sí como lo ha leído, no hay militancia registrada en Querétaro. De tal suerte que ese partido no tiene vida institucional ni orgánica. No se le ve por ningún lado y si bien está registrado en el IEEQ y recibe recursos públicos derivados del INE, por parte del Instituto local no le otorga un peso como partido, aunque el representante de ese partido en el Consejo General sí gana su dinerito por representar en cada sesión al PES.

 Conclusión. La militancia inscrita en los padrones de los partidos políticos no garantiza triunfos ni derrotas; los triunfos los otorga el electorado sin partido. La unidad o división de la militancia es fundamental para la consecución de los objetivos: triunfos electorales. Se acabó aquella tesis del “voto duro” que garantizaba los triunfos. Ya no es así ¿A favor de quién se dará las simpatías en las próximas elecciones del electorado sin partido?

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