El encharcamiento registrado recientemente en Paseo 5 de Febrero, a la altura del acceso a Tlacote, fue provocado por una combinación de factores: la acumulación de basura arrastrada por la primera lluvia intensa de la temporada y una falla técnica en el cárcamo de bombeo, según informó el secretario de Desarrollo Urbano y Obras Públicas del estado, Pío X Salgado.
El incidente se presentó la noche del pasado sábado y se prolongó hasta la madrugada del domingo, dejando hasta 40 centímetros de agua acumulada en la vialidad por un lapso aproximado de dos horas. Afortunadamente, no se reportaron daños materiales ni afectaciones a personas.
“Lo primero que rueda en la ciudad cuando inician las lluvias es la basura. Lamentablemente, se presentó un problema de acumulación que, sumado a la falla de un arrancador que no se activó a tiempo, provocó el encharcamiento”, explicó Salgado. “Una vez rehabilitado el equipo, todo volvió a funcionar con normalidad”.
El funcionario estatal subrayó que este ha sido el único encharcamiento reportado en la zona de Paseo 5 de Febrero en lo que va de la temporada, y aseguró que, tras la revisión correspondiente, los cárcamos se encuentran en condiciones operativas y han funcionado correctamente en las lluvias posteriores.
En contraste, reconoció que otras zonas del municipio, como Menchaca y San Pedrito Peñuelas, enfrentan una problemática estructural más profunda, derivada del desarrollo urbano irregular de las últimas décadas.
“Es una zona históricamente complicada. Las avenidas de agua provienen de la cuenca alta de San José el Alto, y no hay suficientes obras de control”, señaló.
Aunque existe coordinación con el municipio de Querétaro, Salgado admitió que no hay actualmente proyectos estructurales en marcha para mitigar los escurrimientos pluviales en dichas colonias, y que se requiere un análisis integral para evaluar posibles soluciones a largo plazo. Sin embargo, advirtió que ya no hay espacio suficiente para construir nuevas obras de regulación en la zona.
Respecto a otras regiones del estado, como San Juan del Río y Tequisquiapan, el titular de Obras Públicas indicó que los cauces operan con normalidad, aunque se han registrado escurrimientos importantes en el río San Juan. En cuanto a la presa Constitución, su nivel ha comenzado a subir, pero por ahora no representa un riesgo mayor.
