Tras el trágico accidente ocurrido la mañana de este miércoles en Calzada de los Arcos, donde una mujer perdió la vida presuntamente a causa de una conductora en estado de ebriedad, el gobernador de Querétaro, Mauricio Kuri González, hizo un enérgico llamado a reforzar las penas para quienes ponen en riesgo la vida de otros en la vía pública.
“Yo siempre he estado a favor de ser muy duro con la ley. Si queremos vivir en comunidad, con bienestar, con un bien común, tenemos que ser muy firmes”, expresó el mandatario al ser cuestionado sobre posibles reformas legales para sancionar con mayor severidad este tipo de hechos.
Aunque reconoció que actualmente las leyes ya contemplan sanciones para quienes conducen bajo los efectos del alcohol, consideró que es momento de fortalecerlas, particularmente ante incidentes que dejan víctimas fatales.
Kuri lamentó profundamente el accidente y reiteró que aunque la revisión del marco legal corresponde al Congreso local, su gobierno continuará impulsando acciones para reducir los accidentes viales, especialmente en avenidas de alto tránsito como Bernardo Quintana.
“Yo soy de la idea de poner radares, aunque a mucha gente le moleste. No tienen un fin recaudatorio, sino preventivo”, subrayó.
Asimismo, abrió la posibilidad de ampliar los horarios de operación de los alcoholímetros, con operativos sorpresivos, en diferentes puntos y con sanciones más estrictas para quienes sean detectados conduciendo bajo los efectos del alcohol.
En cuanto a la regulación de antros y bares, Kuri señaló que el secretario de Gobierno ya mantiene diálogo con empresarios del ramo, aunque enfatizó que la corresponsabilidad también recae en quienes expenden bebidas alcohólicas:
“Debe ser más fácil ser formal que informal. El formal se puede vigilar, regular, hacer responsable. Necesitamos volver a trabajar en fomentar el conductor designado y otras medidas de prevención”.
