La Secretaría de Salud del estado informó que un menor de edad fue sometido a injertos en el rostro como parte del tratamiento inicial, luego de sufrir severas lesiones por el uso de pirotecnia.
La titular de la dependencia, Martina Pérez Rendón, detalló que el paciente también perdió un ojo y permanece hospitalizado bajo atención médica especializada, con apoyo del Instituto Mexicano de Oftalmología, donde se evalúa el daño restante en el segundo ojo.
“Hay que esperar la evolución. Perdió un ojo y se evalúa el resto del ojo”, señaló la funcionaria.
Los injertos forman parte de la primera etapa de recuperación de las quemaduras faciales, mientras el estado de salud del menor se mantiene bajo vigilancia médica permanente. Las autoridades sanitarias subrayaron que las valoraciones clínicas continuarán para definir el tratamiento a largo plazo.
