El nivel de almacenamiento en la presa Zimapán ha alcanzado el 97.4% de su capacidad, lo que ha encendido las alertas de las autoridades estatales ante un posible desfogue controlado por parte de la Comisión Nacional del Agua (Conagua) y la Comisión Federal de Electricidad (CFE).
Luis Alberto Vega Ricoy, vocal ejecutivo de la Comisión Estatal del Agua (CEA), informó que se mantiene un monitoreo constante de la situación, y advirtió que, si el embalse llega al 100%, se podría autorizar la liberación de hasta 500 metros cúbicos por segundo, lo que representa un riesgo para las familias asentadas cerca del río Moctezuma y también para el funcionamiento del Sistema Acueducto II, que suministra agua potable a la zona metropolitana de Querétaro.
“La presa hoy amaneció con un nivel de llenado del 97.4%. Cuando se alcanza el 100%, la Conagua decide desfogar. Esto ya ha ocurrido en dos ocasiones en los últimos 15 años”, precisó Vega Ricoy.
El funcionario explicó que, ante un desfogue, sería inevitable suspender temporalmente el servicio de agua potable en aproximadamente 300 colonias, debido a una posible contaminación del recurso hídrico.
“Para tener una referencia, nosotros extraemos 1.5 metros cúbicos por segundo del río. Cuando hay desfogue, la presa libera hasta 500 metros cúbicos por segundo”, detalló.
Finalmente, subrayó que es fundamental que las autoridades federales informen con al menos cuatro días de anticipación si se decide llevar a cabo esta medida, para que la población y las autoridades estatales y municipales tomen las precauciones correspondientes.
