“Frecuencias”.
Esa es una típica expresión utilizada en el ambiente artístico teatral para aquellos actores que estrenan su participación en una obra, o bien cuando aún y ya cuenten con experiencia en ese ámbito desean tener buena suerte en una determinada pieza teatral; normalmente otro histrión de mayor y reconocida experiencia profesional les dan una simbólica y leve patada, en señal de buena suerte.
Algo similar ocurre en la política, pero aderezado de mayúsculas desavenencias, sainetes y grotescas actitudes de significativa traición, al interior de las organizaciones políticas, cuando un político pretende lograr una mejor y apetecible posición, como candidato a un cargo de elección popular.
Los hay quienes mandan espiar conversaciones telefónicas y de videos comprometedores, incorporando además una serie de comentarios deleznables y de enfáticos mensajes, considerados harto ponzoñosos. El marcado sentido será con la finalidad de derrotar o de sacar buena ventaja por sobre otro(s) personajes.
Sin embargo, muchas ocasiones y como refiere el adagio popular, “siempre las cosas caen por su propio peso”.
Es el claro ejemplo del aún diputado local panista Jorge Lomelí Noriega, quien se sintió desplazado por el diputado federal José Guadalupe (“Lupe”) García para contender al interior de Acción Nacional al cargo de presidente municipal de El Marqués y que ha emprendido una serie de subrepticias y deleznables acciones, plagadas de intrigas, comentarios públicos y ediciones de supuestas extorsiones (no comprobadas) en contra del hasta poco tiempo funcionario público municipal Miguel Noriega, entonces Secretario de Administración –paradójicamente éste es primo de Jorge Lomelí Noriega-; si eso le hizo a su pariente, ¿qué no le podría hacer a otra persona? Eso y más, asumimos.
Adicionalmente, se dice que quien se prestó para esa perversa triquiñuela, aparte de la mal editada y “truqueada” grabación rupestre fue una persona encargada de la comunicación, cercanamente conocida de Jorge Lomelí Noriega; el otro fue el nefasto comparsa y que se hace llamar como uno de los líderes de la comunidad de “La Cañada”, de mote “Bruno”, persona que desde tiempo atrás se dedica a rentar carpas, mesas y sillas para eventos sociales y políticos.
Pues bien, la realidad es que cuando fue la toma de protesta de Enrique Vega Carriles (20012) como edil de El Marqués, las arcas municipales se encontraban vacías y con problemas de insolvencia financiera para con múltiples proveedores; no tenían dinero para pagarles.
Hay que recordar, una vez más que el entonces presidente (priista) Rubén Galicia timó y defraudó a ese municipio; aún no cae el peso de la Ley sobre ese individuo, la demanda está enfriada en la misma Procuraduría de Justicia del Estado de Querétaro.
El mismo Lomelí Noriega se ha encargado de mencionar, sin comprobación alguna, que Enrique Vega Carriles llegaría a “un acuerdo benéfico” y monetario con Rubén Galicia para que la demanda interpuesta no estuviese bien fundamentada, en consecuencia, ésta sería sobreseída. Afirmaciones por demás dolosas y faltas a la razón, en tanto no lo pueda comprobar fehacientemente.
Como también inferimos que el propio Lomelí Noriega, a través de incondicionales suyos “filtró” descaradamente unas fotos que movería a pensar que presumiblemente dos hijos de “Lupe” García andarían en “malos pasos” y según él, pareciesen ser los hijos “incómodos” del ahora flamante candidato al municipio que Lomelí Noriega anheló ser candidato panista.
Una vez más, la obsesión por querer pretender a todas luces lograr otros estadios del desarrollo político-financiero, sin contar con la suficiente fuerza interna y de grupo y de su implícito arraigo y empatía entre la comunidad que dicen representar, lo anterior pasa a último término, cuando se obscurece la lógica y la congruencia del pensamiento, del entendimiento.
Si cualquier persona habla del “Bien común” y quiere vivir de la herencia del pensamiento y Doctrina del Partido político que fundara Manuel Gómez Morín, junto con otros ideólogos, luego entonces, son gesticuladores, engañadores y pésimos histriones; no se la creen ni ellos mismos.
¡Hay de políticos a buenos políticos!
Volviendo al caso que nos ocupa, el de Jorge Lomelí Noriega, éste perdió en las elecciones locales en el 2009, frente al gris y corrupto priista llamado Rubén Galicia, el actual empresario de los globos aerostáticos. !Éste último vaya que vuela muy alto!
También a Lomelí Noriega le tocó Coordinar la campaña interna de Gustavo Madero Muñoz, rumbo a la dirigencia nacional del PAN, específicamente en los municipios de El Marqués y de Huimilpan, en ambas demarcaciones Madero Muñoz salió derrotado por las huestes relacionadas con el senador de la República, Ernesto Cordero Arroyo. A Lomelí Noriega no le fue nada bien, entonces.
La suma de internos yerros, le valieron que no pudiera concretar su segunda aspiración y optó por cambiarse de chaqueta y públicamente mencionó que debido a una añeja amistad con Mario Calzada Mercado es que le está apoyando, aún y cuando él, afirmó que “es congruente y sigue siendo panista”. Además de que “Lupe” García no es confiable.
¡Cuidado con los remedos de Caballos de Troya!
Muy probablemente dejará de ser panista después de las próximas elecciones del 7 de junio; es lo más sensato y congruente. Una vez más, el “fuego amigo” se presenta con los esquiroles, chapulines y chaqueteros, es el caso específico de Lomelí Noriega.
Sólo hay recordar que el aún diputado federal y candidato José “Lupe” García ha presentado en San Lázaro 9 Iniciativas de Ley, junto con el Grupo Parlamentario de Acción Nacional; 3 de ellas personal. Éste se perfila como seguro triunfador en El Marqués, derivado de su acercamiento y afinidad realmente campechana con la gente y de su trato directo con las comunidades, la mayoría de los marquesinos se ubican en zonas rurales y viven del campo; no olvidemos que también existen muchos ciudadanos que viven en los Fraccionamientos y en áreas residenciales de esa demarcación urbanizadas recientemente, pero que o bien no tuvieron oportunidad de tramitar su nueva Credencial para votar del INE, o bien por abulia es que no emitirán su voto el 7 de junio.
Será otro cantar para las elecciones presidenciales del 2018.
Por cierto, en El Marqués, en poco menos de 3 años, con la actual administración encabezada por Enrique Vega Carriles se han incrementado a 10 mil la construcción de nuevas viviendas; el desproporcionado crecimiento poblacional, derivado de la migración hacia la zona conurbada de Querétaro es lo que ha propiciado la necesidad de contar con mayor infraestructura carretera, así como la necesidad de incorporar mayor cantidad de servicios del drenaje, agua, luz, además del correspondiente equipamiento básico y del apoyo a la seguridad pública municipal.
Por cierto, en el trienio anterior (2009-20012) la entonces presidencia del munícipe priista Rubén Galicia, recibió del anterior gobierno municipal de Enrique Vega Carriles nuevos camiones recolectores de basura; la seguridad pública y parte importante de El Marqués había sido pavimentado; luego entonces, a Rubén Galicia le habían facilitado el camino; no supo capitalizar esos avances.
Sin embargo, durante el periodo del 2009 al 2012, se presentaron retrocesos en cuanto a la infraestructura de servicios públicos municipales, en el decrecimiento de la calidad de la seguridad pública y además aumentó la venta clandestina de alcohol, aunado a la deficiente administración. Por cierto, aún se encuentra parado el trámite de la demanda por fraude, interpuesta por el gobierno de El Marqués, en contra de Rubén Galicia por no haber comprobado un desfalco que sumaban $300 millones de pesos.
Recordemos que por entonces, el actual candidato del PRI a esa alcaldía, Mario Calzada Mercado fungía como Regidor en el equipo de Rubén Galicia. Otro ejemplo que materializa la corrupción en esos años fue cuando los hermanos Miguel y Mario Calzada Mercado le “donaron” un terreno al municipio marquesino, cuyo costo no ascendía a los 4 millones de pesos y de la “donación” altruista de ese entonces, pasaron a la descarada y ominosa venta de ese mismo terreno por la suma elevada de $14 millones de pesos; de ello dieron cuenta y aprobación los regidores de ese tiempo.
¿Acaso eso no es un flagrante caso de Conflicto de intereses?
!Ah qué memoria, qué memoria!
Y aun así en el PRI les entusiasma la idea de seleccionar a candidatos, que a todas luces han sido evidentemente corruptos.
Muchos marquesinos, entre ellos priistas, como Juan Ramírez ventilaron públicamente ese asunto -el pasado mes de febrero-, dirigiéndose a los hermanos Calzada Mercado como un par de hampones de cuello blanco”- consideran que de regresar el PRI, se repetirían las mismas acciones realizadas durante la presidencia de Rubén Galicia.
Otro “secreto a voces” es el que se ha diluido -no sólo de boca en boca-, sino que se ha magnificado en algunas redes sociales (YouTube y Facebook), es la considerable suma de dinero que los conocedores del tema señalan que ascendió a 800 mil pesos, la cantidad de recursos que le fueron entregados al mencionado “líder” de la comunidad “La Cañada”, conocido como “Bruno”, su verdadero nombre es otro, y que hace tiempo se prestó al “show” mediático para hacer creer que era sujeto de extorsiones por parte de Mario Noriega, entonces Secretario de Administración, ambos eran los sólidos sustentos (las “piernas” altamente fiables de Vega Carriles); ese era considerado como uno de los dos bastiones de la administración del alcalde Enrique (“Kike”) Vega Carriles, el otro era Cirilo Ibarra, a la sazón director de Obras Públicas; ambos de la gran confianza de “Kike”.
Mario Moriega es primo del diputado local Jorge Lomelí Noriega. Qué desproporcionada y marcadas maquiavélicas acciones las emprendidas por Lomelí Noriega, en su afán de -a toda costa- querer continuar abrevando en mala manera del erario público.
Vaya que su intención clara era la de amputar un área importante de la administración municipal marquesina; “le salió el tiro por la culata”. No logró contar con el consolidado apoyo de los grupúsculos de las facciones del PAN para ser ungido, por segunda ocasión hacia la candidatura del Municipio de El Marqués.
Por otra parte, sucede que desde antes de iniciar oficialmente el actual y segundo trienio de Vega Carriles (2012-2015), el erario de El Marqués se encontraba en franca bancarrota, se registraban múltiples adeudos con los proveedores, herencia del improductivo y mediocre transitar público de Rubén Galicia.
El alcalde Vega Carriles, con fuertes y marcados obstáculos pudo establecer y convenir en los pagos y ha sacado adelante a El Marqués, y “se pudo enderezar el rumbo del barco que zozobraba”; es menester mencionar eso; Vega Carriles se sobrepuso a la pésima “administración” de Rubén Galicia.
Es menester mencionar –a vuelo de pájaro- lo realizado, hasta nuestros días, por parte del gobierno del edil Enrique Vega Carriles; se registra un incremento del 70% en la provisión de servicios básicos y fundamentales para la población, como son: infraestructura vial, agua, luz, drenaje y de seguridad pública.
La demanda interpuesta en contra de Rubén Galicia sigue en la congeladora de la Procuraduría de Justicia del Estado de Querétaro, a cargo de Arsenio Durán. ¡Esa está durmiendo el sueño de los justos! Eso de que “la Justicia es pronta y expedita” es puro sueño guajiro.
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