El ombudsman Miguel Nava señaló que se inició una queja de oficio en la Defensoría de los Derechos Humanos de Querétaro (DDHQ), debido a la contaminación de arsénico, de un manantial en Pinal de Amoles, para determinar si se violentó el derecho al agua, de los habitantes.
“Niños ingirieron agua contaminada y nos estamos dando a la tarea de investigar qué es lo que está pasando, porque el derecho al agua potable y su saneamiento todavía no es realidad, son muchas las circunstancias que convergen para generar una cultura del respeto a la dignidad humana”.
Refirió que la queja de comenzó en la oficina de la DDHQ, ubicada en el municipio de Jalpan de Serra, debido a que 120 personas se intoxicaron por la contaminación del manantial, en la comunidad del Llano de San Francisco, por lo que se investigará cuántos niños y niñas fueron afectados.
“Lo que hicimos, fue iniciar oficiosamente, tenemos una oficina en Jalpan y el que es visitador debe estar en Pina de Amoles, para recabar los datos precisos, para que podamos encausar la queja, somos cautelosos, si existe una autoridad, como al parecer por medios de información, que es la Comisión Estatal del Agua, se garantiza el derecho de audiencia, la presunción de inocencia, tiene que informar qué está pasando”.
Afirmó que el derecho al agua potable y su saneamiento, está en la Constitución, por lo que el Estado está obligado a garantizar el líquido vital.
“Esto porque personas ingirieron agua, entre ellos menores, de edad, pero al parecer está contaminada y les ha ocasionado un deterioro a su salud”.
El presidente de la DDHQ, finalizó que los derechos humanos no dejan de ser un discurso político porque no se materializan.
