Fueron dos sismos los que se presentaron el pasado lunes en los límites entre Querétaro y Guanajuato, específicamente en Pinal de Amoles, el primero con intensidad de 4.0 grados y el segundo de 2.4 grados, en escala de Richter, con diferencia de 4 horas, de acuerdo al Centro de Geociencias del Campus Juriquilla de la UNAM, informó el titular de la Coordinación de Protección Civil del Estado de Querétaro, Javier Amaya.
Comentó que estos sismos se debieron a un acomodo de placas tectónicas, como sucede constantemente en zonas montañosas, sin que representen mayores riesgos.
Javier Amaya expresó que no se presentaron daños y afectaciones a infraestructuras, pero se pudo percibir en los municipios de la zona serrana.
“Es un movimiento normal en la zona y constantemente hay movimientos en toda la sierra por el acomodo de placas, por la geografía que existe ahí, es algo normal y no existe mayor riesgo”, afirmó.
El coordinador mencionó que el Centro de Geociencias sigue estudiando estos hechos.
