Teresa García Gasca, Rectora de la Universidad Autónoma de Querétaro, señaló qué el principal factor por el cuál no concluyen las denuncias presentadas por estudiantes de la UAQ, relacionadas con violencia de género, corresponde al desestimiento de parte de las víctimas.
“El miedo es uno de los principales factores, es un proceso de cambio, de confianza en las autoridades y de comprender el proceso. Tenemos denuncias de chicas y ellas mismas piden que la carpeta no prosiga porque tienen miedo, por muchas razones y si ellas no quiere que la carpeta prosiga, no podemos proseguir”, declaro García Gasca.
Derivado de los señalamientos hechos por activistas de distintos colectivos feministas, sobre una aparente falta de respuesta por parte de autoridades universitarias, en los supuestos casos de violencia de género cometidos por docentes de la institución, aseguró qué se atienden todas las denuncias directas e indirectas, dándoles el debido seguimiento para poder darles una solución.
“Las jóvenes el miércoles me decían que hay encubrimiento, yo puedo asegurar que no somos omisos, somos un equipo de trabajo, yo no llevo la voz de dictar línea. Debemos actuar con el debido proceso
No hemos sido omisos en ningún caso”.
En este sentido informó que durante el 2021, se recibieron 71 denuncias y en el presente año de enero a julio se ha tenido una recepción de 72, cifra que consideró pudiera duplicarse al cierre del 2022.
“Tenemos que seguir incrementando la cultura de la denuncia, por más que estemos convencidos que el agresor es culpable, sino tenemos los elementos suficientes, si ya prescribió, sino va conforme a la ley, entonces estamos muy limitados para la ejecución de sanciones y es en donde las chicas perciben qué hay una falta de atención”.
Además indicó que la prescripción de la denuncia es un factor lamentable para otorgar sanciones a los agresores, quienes según la ley, reciben condenas mínimas.
“El problema a veces que los procesos largos a veces sobrepasan los procesos legales y entonces prescriben los procesos legales. Tengo chicas que me han venido a denunciar 2 años después de haber sufrido la agresión y una de las situaciones es que no podemos correr al agresor porque el tema ya prescribió. Es un tema de impotencia. No podemos seguir adelante y tenemos que dar sanciones menores”.
Otro de los factores para no realizar las denuncias que la rectora García Gasca señaló como principal, es la normalización de la violencia y el tiempo que necesita la víctima para asimilar y posteriormente enfrentar la agresión.
