Esta frase se ha hecho célebre en el estado de Querétaro, después de un acto delictivo grave, siempre existe una justificación, “son de fuera”, “es un hecho aislado”, “no pasa nada”, siempre fueron más rápidas las excusas que los actos en contra de la delincuencia.
Homicidios, secuestros, robos con violencia, violaciones, siempre fueron callados y manejados de manera clasificada para no generar psicosis, evasiva que se manejaba en el medio policiaco, una más, es para proteger a las víctimas y sus familiares, declararon.
Hoy las justificaciones y fracasos, no solo son de los cuerpos policiacos, los Ministerios Públicos y Jueces son parte de la impunidad que está cambiando nuestro estado que hace años presumía que no pasaba nada.
Nadie por años olvidará al funcionario público que matara a dos jóvenes y dejará casi paralítico a otro, con rabia los ciudadanos, nos enteramos que no era la primera vez, años atrás ya había matado a otro, de la misma manera, conduciendo en estado de ebriedad, hechos que con dinero y poder, tienen al responsable disfrutando de la libertad.
Casos más recientes, una joven que fue ultrajada por un cobarde. Destrozada, se presenta a la agencia especializada en delitos sexuales, aporta todos los elementos para el castigo del agresor, y por la exagerada carga de trabajo del Ministerio Público, no se consigna su caso, caída en la depresión la víctima decide arrancarse la vida aventándose de un puente peatonal, el agresor, sigue libre gozando de la impunidad.
Hace unos días, un mozalbete en estado de ebriedad, circulaba en sentido contrario por una arteria principal, Boulevard Bernardo Quintana, su loca carrera la termina al impactar de frente un pequeño vehículo, privando de la vida a su conductora, a las pocas horas es liberado por ser menor de edad, la autoridad judicial encargada de castigar los actos delictivos, se convierte en protector de un homicida solo por no tener la mayoría de edad, hecho que lo tiene en la calle gozando de la libertad, mientras su acto despedazó a una familia inocente.
Y qué decir del hermano del expresidente municipal de Corregidora, José Félix Mendieta Olvera, detenido con varias dosis de droga en el momento de comercializarla, tardaron más en presentarlo a la autoridad correspondiente, que en regresar a la calle a seguir delinquiendo, el narcomenudeo es su forma de vida, regresa a la calle a vivir de los mismo.
Es por eso que en nuestro Querétaro de hoy, no pasa nada, puedes delinquir sin problema, puedes privar de la vida a las personas con la mayor impunidad siempre y cuando, conduzcas en estado de ebriedad y gozar de la libertad, gracias a la carga de trabajo y nulidad de nuestro sistema judicial.
