Los mercados municipales de Querétaro sostuvieron un incremento de afluencia en estos primeros días que retomaron sus actividades debido a que Querétaro fue ubicado en el semáforo naranja del riesgo epidemiológico por COVID-19.
Se mantienen los filtros de acceso para controlar el aforo en los mismos, sin permitir acceso a niños, personas mayores de edad, mujeres embarazadas, además de que solo se permite el acceso de una persona.
De acuerdo al director de servicios complementarios de la secretaría de servicios públicos municipales de Querétaro, Francisco Carlos Morales Sendel, la visita de las personas a los mercados es -con mayor frecuencia- de manera rápida, sin quedarse a comer o disfrutar de alguna otra amenidad, únicamente adquieren sus productos de primera necesidad y se retiran.
Mercados como el de La Flores reinició operaciones, el cual estaban cerrado totalmente debido a que, contrario al resto, no estaba en el rango de esenciales, pue no ofrece alimentos.
Mercados como el de La Cruz que tien alrededor de 550 locales, tenía en operación durante el confinamiento 300, esto antes de que la entidad cambiara a semáforo naranja; la afluencia en el mismo durante el confinamiento fue de 30 por ciento en promedio, ahora subió a 80 por ciento.
En el mercado de El Tepetate la afluencia era del 50 por ciento en promedio durante el confinamiento, ahora es del 60 por ciento; mientras que en El Mercado Escobedo era del 30 por ciento en promedio, ahora incrementó a 80 o 90 por ciento.
Por otro lado, algunos tianguis comenzarán operaciones este fin de semana, entre ellos el que se ubica en el mercado de La Cruz, otros comenzarán a aperturar otros negocios, debido a que solo ofrecían estaba trabajando aquellos que ofrecían productos esenciales como lo estableció la autoridad sanitaria.
